
Debido a la crisis global que impacta nuestra rutina, es importante ver cómo podemos aprovechar la tecnología para mejorar la forma en la que vivimos. Gracias al Internet de las Cosas (IoT), hoy contamos con dispositivos portátiles, dispositivos médicos, sensores ambientales, captura de vídeo y otros equipos conectados como nunca. Cuando esto se combina con tecnologías en la nube, como la visión por computadora, el Machine Learning y la simulación, comenzamos a vislumbrar hacia dónde nos puede llevar esa poderosa combinación de información y aplicación.
Los deportes, por ejemplo, podrían convertirse en flujos de datos que podremos analizar para transformar a la industria del deporte y redefinir lo que significa jugar y experimentar cada partido.Las principales ligas, como la Bundesliga y la NFL, ya están utilizando transmisiones de vídeo, dispositivos portátiles, sensores IoT y la tecnología en la nube de Amazon Web Services (AWS), para obtener información en tiempo real mientras suceden los partidos. La Fórmula 1 (F1), por otro lado, anunció recientemente el lanzamiento de veinte F1 Insights basados en datos recolectados por la tecnología de aprendizaje automático (ML) de AWS. Estos datos se transmiten en vivo para los fans vean el rendimiento de los coches y la información de los competidores mientras miran las carreras.
De cara al futuro, la asociación entre deporte y tecnología tiene el potencial de avanzar al punto que un entrenador podría usar la visión artificial y los datos biométricos que se analizan en la nube en tiempo real para reemplazar a un jugador antes de que tenga calambres o conceda un gol, reemplazándolo por el compañero de equipo mejor descansado, pero ahora con argumentos cuantificables. La tecnología, en sí misma, se convertirá en la base competitiva de los deportes profesionales.
La inteligencia Artificial y el Internet de las Cosas también pueden ayudar con la crisis energética ya que, a futuro, los datos de paneles solares, parques eólicos, energía geotérmica e hidroeléctrica se transmitirán, almacenarán, monitorearán, enriquecerán y analizarán en la nube. Gracias a esto, los dispositivos de consumo inteligente basados en IoT conducirán a la próxima ola de innovaciones que surgen de las capacidades de observación que estos equipos brindan tanto a los hogares como a las empresas. Smartmation, una empresa argentina especializada en IoT, produce sistemas de telegestión de luminarias para mejorar el tiempo de reparación de fallas, reducir los reclamos de los ciudadanos y generar mayor sustentabilidad, ya que las luces inteligentes emiten menos dióxido de carbono.
Los desafíos logísticos, por otro lado, son cada vez más frecuentes gracias al aumento en la demanda de comercio electrónico que causó la pandemia: las entregas tardías, los productos no disponibles y las estanterías vacías se están convirtiendo en un mal frecuente para comerciantes y clientes. Sin embargo, gracias a la aplicación de sensores de IoT y Machine Learning en las fábricas, cada vez será más fácil predecir y prevenir fallas en las maquinas. Al tener menos tiempo de inactividad, la producción puede ser más constante. Las redes digitales de carga impulsadas por la nube, por su parte, atravesarán grandes distancias proporcionando datos en tiempo real que permitirán a los transportistas optimizar las rutas de envío y todos los niveles de la cadena de suministro para que sean más eficientes, especialmente si hay eventos inevitables, como problemas climáticos.
A medida que el acceso a la tecnología avanzada se vuelva aún más omnipresente, ya que cada faceta de nuestra vida se convierte en datos que podemos analizar, veremos un torrente de innovación y transformación de nuestra vida cotidiana durante 2023. En AWS buscan acercar la AI a las empresas de cualquier tamaño para comprender mejor las prácticas de consumo de los usuarios, hacer mejores recomendaciones de compra, reforzar su seguridad y mejorar la experiencia del cliente.