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Balanceo de carga: lo novedoso, lo diferente

Hoy en día, todos los que navegamos por internet pretendemos que los sitios web sean accesibles lo más rápido posible. Sin duda, la experiencia de usuario es lo más importante, por eso las empresas se preocupan tanto por brindar el mejor servicio posible.

Sin embargo, debemos recordar que estos sitios web están alojados en servidores web y estos, a su vez, cuentan con un límite de capacidad. Una web con alta demanda no podría, realmente, subsistir sin un balanceador de carga.

O sea, cuando un servidor de Internet se vuelve lento debido a la congestión de información, la solución más obvia es ampliar la memoria. Pero la opción más razonable a largo plazo es configurar más servidores y repartir las peticiones de los clientes entre ellos. Esto incrementa la velocidad de acceso del usuario al servidor, mejora la fiabilidad del sistema y la tolerancia a fallos.

De forma sencilla, el balanceo de carga es la manera en que las peticiones de Internet son distribuídas sobre una fila de servidores. Los balanceadores de carga pueden ser soluciones de tipo hardware, tales como routers y switches que incluyen software de balanceo de carga preparado para ello, y basado en software, que se instalan en el back end de los servidores.

En el mercado mundial, hay muchas marcas que se especializan en esta temática. Por ejemplo, encontramos a F5, con BIG-IP, diseñado para garantizar la velocidad, la disponibilidad y la seguridad de las aplicaciones y redes críticas para el negocio. También podemos tomar como ejemplo a VMware, que en su portfolio de soluciones presenta la plataforma NSX Advanced Load Balancer with Cloud Services, la cual dispone de servicios de balanceo de carga multinube, cortafuegos de aplicaciones web y entrada de contenedores.

Otra solución ideal para controlar la red es el Firewall Thunder ADC, de A10 Networks, un controlador de entrega de aplicaciones de nueva generación y alto rendimiento, que hace posible que las aplicaciones de los clientes tengan la más alta disponibilidad, velocidad y seguridad. Por su parte, Hillstone Networks ofrece ADC, que combina amplias capacidades de balanceo de carga con una base segura de grado empresarial.

En su último informe, Gartner predice que el mercado de servicios en la nube pública alcanzará los 397.400 millones de dólares en 2022. La pandemia generó un cambio enorme en los negocios, que llevó a una aceleración marcada de la adopción cloud. La contenedorización, la virtualización y la informática edge se han vuelto rápidamente más comunes. En su estuduio, Gartner señala que las empresas se enfrentan a presiones continuas para escalar la infraestructura que admite el traslado de cargas de trabajo complejas a la nube.

Como podemos ver en el gráfico 2, el gasto en Infrastructure as a Service (IaaS) aumentó más de 22 mil millones de dólares en 2021, la mayor ganancia de ingresos de un servicio en la nube. Claramente, los equipos de TI están invirtiendo en infraestructura para escalar mejor las operaciones y dar soporte a los equipos virtuales. 

Esto se da por tres motivos, primero porque están creando una estructura virtual escalable, para que la empresa se pueda proyectar. Segundo, porque el valor de los datos y las nuevas aplicaciones SaaS requieren cada vez más atención. Por último, porque existe una necesidad alarmante de mejorar la ciberseguridad en la nube.